Ubicado a las faldas del Castillo de Santa Bárbara, el Barrio de Santa Cruz en Alicante es uno de los barrios más típicos y tradicionales de la ciudad.
El Barrio de Santa Cruz ofrece un recorrido alegre y pintoresco. Sus callejuelas nos crean la impresión de encontrarnos en un pueblecito con mucho encanto. Sus casas son muy coloridas y originales, y cada hogar cuenta con una decoración distinta, no hay dos casas iguales.
Pasear por sus calles es una gozada, y las vistas panorámicas que ofrece bien merecen el pequeño esfuerzo que supone recorrerlo (te recomendamos llevar calzado cómodo, pues el terreno es elevado y hay numerosas escaleras).
Aunque la visita al Barrio de Santa Cruz es recomendable todo el año, hay dos fechas en especiales en las que el barrio se llena de vida: la Semana Semana Santa y la festividad de las Cruces de Mayo.
Semana Santa: el Miércoles Santo, la Hermandad de la Santa Cruz baja desde la Ermita de la Santa Cruz cargando cuatro pasos religiosos por las empinadas y estrechas calles del barrio. La originalidad y el atractivo de esta procesión residen en los obstáculos que tiene el recorrido de los pasos, debido a la inclinación y a la dificultad de sus calles.
Las Cruces de Mayo: esta fiesta, que se celebra en numerosas localidad del país, llena de alegría y color el Barrio de Santa Cruz. Las calles se engalanan con numerosas cruces de claveles y durante cuatro días consecutivos el barrio se sumerge en un ambiente festivo y cálido.